viernes, 17 de septiembre de 2010

La ceremonia del Kava

Un rito ancestral común a muchos países del pacífico sur y que hoy en día reviste la misma importancia en actos sociales es la ceremonia del Kava o Yaquona. El Kava es una bebida ritual hecha con las raíces secas de la planta de la pimienta (Piper methyscum) que a modo de brevaje se ingiere en todo tipo de acontecimientos sociales, bodas, funerales, visitas, negocios etc. En Vanuatu se planta una variedad de esta planta desde hace más de tres mil años, lo que nos da la medida de lo que representa en su cultura. En nuestro caso, cada vez que fondeamos en cualquier lugar, el protocolo exige visitar al jefe de la tribu, poblado, o isla, con nuestro kava mostrándole nuestros respetos y solícitos, demanadar el permiso de permanecer en sus aguas, a lo que siempre accedn igualmente agradecidos por compartir su espacio.

Nos tocó comprar uns buena cantidad de raiz seca que ibamos ofreciendo a medida que avanzaba nuestra navegación por estas aguas. Aquí se ve lo que ofrecíamos cada vez que desembarcábamos en un sitio nuevo

La raiz se muele y diluida en agua se consume en cuencos normalmente hechos con cocos. De un sabor impenetrable y repulsivo, como si bebieras ciertamente agua de charco sucio, y de un color igualmente turbio, deja un extraño regusto de regaliz picante podrido y tierra mojada. La reacción del cuerpo es normalmente arcadas de vómito, pero al tratarse de un acto en sociedad en el que principalmente el agradecimiento es el nexo de comunión, has de procurar contraer el semblante de la natural muesca de desaprobación al sabor y enfundar la mejor cara para decir ...mmmmm, nice!
Aunque forme parte del folklore y los turistas de los resorts (en la imagen) conozcan la cara menos auténtica de la cultura, está tan arraigado como el respirar

La ceremonia es diferente en cada país, y con diferentes connotaciones, pero en lineas generales el jefe prepara el brebaje y tras recitar un monólogo del que no tienes la más remota idea de por dónde va, da unas palmadas antes de beberlo y luego lo ofrece con sus dos manos a sus visitantes. Estos después de beber han de dar palmadas igualmente y pasar el cuenco, que rule.
El ya no incipente turismo que visita estos archipiélagos del pacífico sur conoce igualmente el kava puesto que se ofrece como folklore junto a las danzas tradicionales, y es otra actividad incluída en el paquete de vacaciones.

Fotografías viejas en postales muestran la naturalidad y constancia de la tradición

En Vanuatu la ceremonia es menos protocolaria y más práctica. De hecho, son numerosos los locales (Nakamals en su lengua) en los que a modo de bares puedes beber kava por un pequeño desembolso, y donde los nativos acuden diariamente a por unos traguitos. En este país beben otra variedad de la planta pero consumida verde en lugar de seca, y sus efectos son más intensos.
Lo curioso del kava es que tiene un poderoso efecto narcótico más que alcohólico. Casi instantáneamente a su ingesta, labios y lengua quedan anestesiados como si el dentista te hubiera rociado con novocaína. Después de beber varios cuencos, no eres capaz de levantar los brazos o caminar. Kava es pura relajación, no deja resaca, no despierta la agresividad, la mente permanece clara y sin alucinaciones. Es la alternativa al alcohol occidental, pero con un profundo sentido cultural. Los jóvenes no lo toman hasta su emancipación, como ceremonia de iniciación a la vida adulta.


Una ceremonia como las que tuvimos ocasión de disfrutar

Ni que decir tiene que los misionerso, en su afán de “mejorar” la vida física y espiritual de los nativos, desaconsejó, y hasta llegó a prohibir su toma.
En mi caso yo sólo lo probé una vez en un pequeño oasis de paz, una noche en Vanuatu, y tras tomar cuatro conchas, unos cuatrocientos centilitros calculo, el descomunal ciego controlado que llevaba sirvió de entretenimiento al resto de la tripulación mientras jaleaban mis grandes éxitos en karaoke endulzados por la fina armonia de la guitarra del maquinista del barco, y cómo no, para mi vergüenza, la grabación de los acústicos de la noche es motivo de chantaje contínuo.
En fin, que si visitáis cualquier país de la zona, obligada parada a la degustación del kava, recuerdos garantizados.

2 comentarios:

  1. Hay un libro llamado Psicodelicias no recuerdo el autor en este momento, en uno de sus capitulos describe el uso que hacen de esta raiz en el pacifico sur, muy bueno y altamente recomendado si te interesan este tipo de sustancias.

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  2. Muy buenas las fotografias, me tome el atrevimiento de subirlas a mi blog.... gracias.

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